miércoles, 6 de febrero de 2008

Roma, arte en cada uno de sus rincones

Puesta de sol en la Piazza San Prieto. Roma 2008

Roma es como un museo en la calle, aunque nada es gratuito aquí...
Paseando por sus calles descubres su historia, te deslumbra su majestuosidad, en cada fontana, en cada piazza...es como encontrar todos aquellos rincones que en ocasiones buscarías para leer un libro o ¿porqué no? para intentar escribirlo, cruzar una mirada, dar un beso apasionado, decir un te quiero, conocer un amor o acabar otro...son rincones en los que se respira vida y los sentimientos están a flor de piel.
Es como soñar sin estar dormido o volar sin cerrar los ojos...sí, así es Roma.



Ciudad histórica, ciudad imperial, ciudad encantada...y ciudad carísima, realmente fue un choque entre primer y tercer mundo, no hacía ni una semana que me encontraba en el norte de Perú sobreviviendo con pocos euros al día y ahora me estaba cobrando 10 euros por dos capuccinos... al principio me pareció increíble y se me pasó por la cabeza explicárselo al camarero, pero en seguida me di cuenta que ambos mundos cada vez están más separados aunque no lo parezca y no solamente a nivel económico. Y por supuesto me pareció un escándalo el precio de algunos de sus museos como el del Vaticano, se supone que la codicia es pecado y debemos ayudar al prójimo, pero a pesar de lo que se predica allí está claro que reina algo muy diferente.


Con Piluki en las puertas del Coliseo

Pero sin duda lo mejor de todo fue la compañía, compartir todo eso con alguien muy especial, alguien que no me ha fallado ni lo hará nunca, alguien que me quiere por encima de todo, alguien a la que el estres o mi mal genio, como dice ella, a veces no me permite compartir más momentos junto a ella. Alguien que sufre más que nadie mis delírios africanos...si así esa ella, y de madre no hay más que una.

No hay comentarios: