viernes, 18 de julio de 2008

365 dias...

Mi 33 cumple en Coco Base, Liberia Julio 2007.
365 dias pasaron...
De los calurosos 33 en Liberia a los fríos blancos 34 en el Aneto
Si el año pasado celebraba mis 33 en Liberia con un gran equipo humano, mi familia durante tres meses intensos junto a la que considero mi hija, como yo llamo a la mayor de mis ilusiones, África; hace tan solo una semana celebraba mis 34 subiendo un Aneto blanco y espectacular, con viejos y un nuevo amigo.
¿Pero que pasó? ¿ Para cuanto da un año?
A veces pienso que da para mucho porque realmente no paré, otras en cambio soy consciente que me quedaron muchas cosas por hacer, pasó tan rápido que necesitaría más...pero todos esos momentos los llevo conmigo y con aquellas personas increíbles que tuve la suerte de conocer.

Después de cumplir uno de mis sueños trabajando en Liberia, vino el viaje con más sabor y más autentico por Mali, luego llegaría mi reencuentro tras diez años con las calles Parisinas compartido con una gran amiga argentina, una francesa y una irlandesa y reencontrandome con un amigo de toda la vida. Después llegarían mis vuelos de gaviota por tierras peruanas. Más tarde la histórica Roma con alguien tan especial como es mi madre. Luego pasé un finde entre más que colegas de trabajo en la envolvente y seductora Granada. Y por último mi semana de veinte leguas submarinas por el Mar Rojo a bordo de un barco muy especial con el único objetivo de sentirme como pez en las profundidades de un lugar precioso. Entre un viaje y otro escalar y escalar cada finde...

¿Y ahora que? ahora llegó el Aneto, que mejor lugar para celebrar una año más, donde me siento con fuerza, y al mismo tiempo me siento pequeñita, un punto insignificante entre la inmensidad de la glacera del Aneto. Seis puntos, aquí arriba seis amigos sintiendo una ilusión en la cumbre, sientiendo cada uno como les habla la montaña, como no ven limites antes sus ojos y como su mente vuela con su corazon a mil kilometros por hora.

Coll de Corones, el Aneto Julio 2008

Desde entonces hasta ahora, todo este tiempo lo comparti en este blog, lo llené de mis reflexiones siempre vertidas con sinceras sensaciones. Con críticas a veces y con entusiamo otras, con las alegrias que la vida me brindó y con las miserias y tristezas inherentes a la propia existencia y al hombre por naturaleza. Todo este tiempo me sentí libre vivendo aquello que hacia, siempre intentando ser una misma.

Conozco lo que ocurrió pero desconozcó lo que ocurrirá solo conozco algo que siempre intentaré que ocurra, seguir intentando ser yo misma.

jueves, 10 de julio de 2008

Andamios...


Andamios de Mario Benedetti...la vida es como un edificio en construcción, lleno de andamios cada vez más altos a medida que va creciendo y evolucionando, unos son complementarios a los otros, sin uno de ellos no habría el siguiente ni el de más arriba.

En muchas ocasiones de niños, de adolescentes incluso de adultos, hemos oído hablar de los héroes de la ficción, en los comics, en el cine y en la tele también. Pero para mí y para muchos existen otra serie de héroes, que existen o lo hicieron, que son reales como tú y como yo, y que en cambio, son ánonimos y no porque no salen en los comics, ni en la tele y muy poco en el cine, sinó porque el cansancio de algunos, el rencor de otros, las ganas de olvidar o de borrar toda una historia han sido más fuertes que la própia historia en si.
Mientras que los héroes de ficción son apóliticos estos de la realidad tiene ideología y mientras que los primeros no mueren, ni envejecen pasando de genereación a generación; los segundos murieron o envejecieron y murieron después y lo peor de todo, fueron olvidados hasta por algunos de su propia generación.
A veces vemos a los bomberos, a los policias, a los médicos...como héroes, pero yo no me refiero a ellos, en mi opinión, sencillamente, hacen su trabajo por vocación o no, y tienen la gratificación de poder ayudar e incluso salvar vidas, mientras realizan su jornada diaria de trabajo.
Pero no, yo considero héroes a aquellos que son capaces de darlo todo incluso la vida por acabar con las injusticias sociales y la represión, que no entienden de nacionalidades y van allí donde creen que pueden ayudar simplemente por una causa común, por una idea de libertad o por ayudar a aquellos que más lo necesitan.
Andamios podría ser la historia de cualquiera y podría haber sucedido en cualquier de todos aquellos países que desgraciadamente sufrieron de una dictadura, pero lo más interesante de este libro es que está explicado, relatado des de la vertiente más humana por lo que es tan cercano, que sus personajes pueden variar segun el lector y sus vivencias. En mi caso no he podido obviar las peripecias que le tocó vivir a mis abuelos maternos, por un color, el rojo, durante una época, la más gris de este país. Por sus ideas les recuerdo y como a ellos y a pesar de no conocerles, des de aquí humildemente y para que no caígan en el olvido, recuerdo a todos aquellos que sufrieron o murieron por una idea en cualquier lugar del mundo, y a aquellos, que lo siguen haciendo hoy en día a espaldas del primer mundo.
Está mal que no conozcamos nuestra historia, nuestro pasado, pero no puedo entender como el mundo entero habla de construir un futuro mientras cierra los ojos a lo que actualmente se está vivendo en lugares como Nepal, Guinea, Kazajistan, Corea del Norte, Siria, Birmania, Mauritania, Sudan, Georgia, Zimbabwe...

Y hablando de héroes... como olvidar a todos aquellos héroes anónimos de este siglo, llamados cooperantes. Individuos que a pesar de no haberles tocado vivir una época gris en sus respectivos países, un buen día, tomaron la decisión de ofrecer parte de sus vidas, de su tiempo, de su historia a millones de historias olvidadas que cada día transcurren en el tercer mundo. Todos ellos son héroes anónimos en un mundo donde las buenas ideas escasean.

"Olvidadizos: Los que olvidan de forma espontánea. Olvidadores: los que quieren obligar a olvidar. De estos últimos hay demasiados y la mayoria vienen de arriba."
Mario Benedetti.
"El mundo entero está salpicado por una dictadira neoliberal que deja morir a niños de hambre mientras millones de toneladas de C02 hacen crecer el bolsillo de pocos y el terror ambiental de muchos"
Anónimo.

lunes, 7 de julio de 2008

Lost in Traslation


Perdida en la aventura de la vida, perdida en un mundo que no es el mio, perdida en un sistema que no comparto de una sociedad desajustada, desdibujada, desfigurada...
Pasaron los años y las cosas no son como soñé, hubo momentos, historias por las que luché y a pesar de ello se quedaron si ilusión, se quemaron, no sobrevivieron y se perdieron en el camino.

De repente, un día te despiertas y te das cuenta de todo esto. Poco a poco te has ido moldeando y dibujando tu entorno y casi sin darte cuenta has ido optando por salidas y soluciones que te han llevado hasta donde te encuentras hoy.
Hoy soy alguien más centrado, más estable que ayer, y voy formándome en una madurez personal que me gratifica, pero en cambio mi vida es un caos en la que los planes, la tranquilidad la calma se fueron con el ayer y el mañana es una tormenta de esas tropicales, que nunca sabes lo que te deparará.
Es contradictorio e ilógico, tuve todos esos bienes materiales que esta sociedad te marca des de que eres un niño...una casa, un buen trabajo, un coche, buenas vacaciones...y además una buena pareja. En otras palabras estabilidad económica y emocional. Parte de eso se derrumbó y con la hecatombe de una dura pero pactada y racional separación, fui consciente de que en el ayer andaba sin ver.
Quizás ahora esté perdida pero soy consciente a cada paso de lo que veo y sobre todo de lo que quiero. Mi mundo es un torbellino en el que giro y giro perdida en un abismo por conseguir lo que deseo , lo que sueño,lo que anhelo...ese mundo, quizás es algo diferente al de la mayoría. Por eso encontrarme perdida en un mundo material, en un mundo en el que los sueños se compran con dinero, en un mundo en el que el más egoísta gana, en un mundo de hipotecas y consumismo, en un mundo donde el amor es artificial, en un mundo sin mártires, sin metas, sin deseos, sin sueños...en este mundo sinceramente no me importa sentirme perdida.